Oscar Jégou y Hugo Araudou, los rugbiers franceses acusados de violar a una mujer en Mendoza, han sido beneficiados con la prisión domiciliaria. La fiscal Cecilia Bignert otorgó esta medida al considerar que no existe riesgo de fuga. Ambos deportistas llevarán pulseras electrónicas para monitorear sus movimientos.
El abogado defensor, Rafael Cúneo Libarona, argumentó que la falta de antecedentes penales y la cooperación de los acusados fueron factores determinantes para obtener la prisión domiciliaria. Además, destacó la necesidad de esta medida por la seguridad de los rugbiers, señalando que la imputación de un delito sexual puede desencadenar represalias en el entorno penitenciario.
Cúneo Libarona confía en que las grabaciones de seguridad y los testimonios demostrarán la inocencia de sus defendidos. La estrategia de la defensa se centrará en presentar estas pruebas en busca de un sobreseimiento.
Por otro lado, la víctima, representada por la abogada Natacha Romano, acusa a los rugbiers de múltiples agresiones y violencia física. La investigación judicial continúa mientras los acusados permanecen bajo arresto domiciliario.
Este caso ha captado la atención mediática tanto en Argentina como en Francia, y se espera que la justicia siga recopilando pruebas para esclarecer los hechos. Mientras tanto, Jégou y Araudou deberán cumplir con las restricciones impuestas por la prisión domiciliaria mientras se desarrolla el proceso legal.
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